Dedicada al ego

Hoy quiero resaltar confiando en que se haga más constante en nuestras mentes, lo importante que es erradicar de nosotrxs el ego, hacer uso de nuestra razón pero sin hacernos dueña de ella, poder enseñarnos que esto que creemos conocer tan bien de nosotrxs mismxs, que ese ego que en ocasiones nos ha cegado la visión y nos ha agarrado fuerte de la mano para llevarnos por el peor camino, ese ego, el ego en sí, en todas sus formas y manifestaciones es un reflejo del cuidado que necesita y reclama nuestra ignorancia.

Conocemos por desgracia lo que se siente, lo que hace en nosotrxs, lo que se siente tras creer que arropa nuestra autoestima del mundo exterior, del miedo ingrato al que nos aferramos, aconsejando a nuestra mente alejarnos de ella misma y haciéndonos sentir superiores, criticando al resto e idolatrando nuestra inconsciencia, incluso conscientes de sus respuestas nos presiona a fortalecer la unión que tenemos con él, aprovechando nuestra mayor debilidad, nuestro mayor descontrol.

Erradicar poco a poco y hacernos ver en cada pensamiento que pase por nuestra cabeza, que la razón pesa más que el ego. Es algo enorme dentro de nuestra superación personal y creo que debemos esforzarnos por siempre tener una crítica constructiva ante nosotrxs y hacer de nuestra vida lo que más lógica vea nuestra locura. Desprendernos del ego y demostrárnoslo poco a poco en pequeños gestos diariamente, al final harán de nosotrxs alguien mejor dentro del mundo social. Que no se haga esencial nunca y que logremos verlo como un superfluo error que es dentro del camino de nuestra paz mental y la de nuestra sociedad. Y ojalá dejar de hablar de ello con un sentimiento de ojalá, que dejemos de soñar como una utopía y nos pongamos a hacer realidad nuestras ideas. No dejar de lado la constancia y sí a aquellos motivos con los que seguimos alimentando a nuestro ego, que empecemos a fortalecer nuestra mente de la manera que realmente merecemos todxs, y hacer nuestras vidas algo más impersonales y sanas de la que disfrutar con el mundo y en individualidad. 

Dejar de ver como una opción presumir y fardar de nuestra persona por mucho que creamos tener o ser, y empezar a demostrar en cada instante de nuestra vida, hacer ver al mundo lo naturales que somos y lo mucho que valemos sin necesidad de creernos mejor que nadie, porque nadie lo es ni será nunca. Optemos por razonar con buenos valores lo que hacemos de nuestra persona y confiemos en la satisfacción personal de nuestro propio crecimiento.

Importante también el hecho de ser conscientes de que vivimos en sociedad y somos ella misma. Nos rodeamos de personas la mayoría de nuestro tiempo, convivimos, y al igual que amamos a muchos seres, debemos amar nuestra soledad, nuestra persona y nuestra vida con humildad, con lo que somos y no lo que nos hemos hecho creer tan ignorantemente percibiendo al mundo desde nuestro ego. Por ello mejor apreciar la prudencia del mundo y la delicadeza con la que debemos tratar a todos los seres que habitamos en él, incluyéndonos como parte del que somos.

Ya para acabar y que no se os haga pesado, os voy a compartir este pequeño cortometraje que probablemente hayáis visto, pero me parece bonito y de acuerdo con el llamamiento que quiero mostrar en esta entrada, y creo que como todo en este mundo, da mucho de qué pensar. 

En el corto se ve muy bien cómo es el humano cuando no es consciente de sus actos, por esa misma base, cuando no se actúa con empatía y razonamiento. En él no resalta el ego de las personas como tal, pero sí esa idea competente y ciega del ser mientras convive, y cómo un simple gesto de bondad hace despertar las ideas de todxs lxs demás dándose cuenta de que trabajando en equipo y viéndonos los unxs en lxs otrxs con unos ojos menos egoístas hacemos del mundo un lugar mucho mejor, con cariño, empatía y humildad, ya que al final el daño que causa el ego y pensar que vivimos solxs en el mundo, de una forma u otra no solo se sufre en personas ajenas a nosotrxs, sino que a quien acaba afectando más es a nuestra conciencia y ser indirectamente.

 Un fuerte abrazo a todxs y gracias.